La Brigada Médica Cubana en Ecuador y el Ministerio de Salud Pública de este país suramericano celebraron hoy la primera graduación de técnicos en atención primaria de salud formados aquí para servir en las comunidades.
 
Trabajar con la comunidad en la prevención y promoción de salud, identificar los factores de riesgo y servir de enlaces con los centros médicos, serán las principales responsabilidades de los técnicos, comentó a Prensa Latina la Master cubana en Atención Integral al Niño, Caridad Guardado.
 
La también Coordinadora de Articulación entre el Instituto Tecnológico Superior Sucre de Ecuador y el Ministerio de Salud de Cuba explicó que los egresados tienen como prioridad conocer a las familias de sus comunidades, por ello realizarán visitas a hogares y trabajarán directamente con equipos de médicos.
 
Con las actividades de prevención que los técnicos deben desplegar se pretende disminuir las enfermedades y la mortalidad, enfatizando en el programa materno-infantil, sostuvo Guardado.
 
Los 71 técnicos graduados este miércoles pertenecen a tres distritos de la provincia de Pichincha, donde se encuentra emplazada esta capital, y fueron seleccionados por los pobladores de sus propias comunidades para estudiar la disciplina en el Instituto Tecnológico Superior Sucre.
 
Ellos serán los representantes de la salud pública en sus comunidades, les corresponde ahora interactuar con el pueblo, identificar riesgos y contribuir a elevar la calidad de vida de la población, aseveró Guardado, maestra junto a otros colegas cubanos de este curso de dos años de estudio.
 
Con la actual promoción, los Ministerios de Salud de Ecuador y Cuba completaron aquí mil 518 graduados como técnicos en atención primaria en 2015, precisó la analista de la Dirección Nacional de Normatización del Talento Humano en Salud, Mayra Merino.
 
Según la funcionaria ecuatoriana, la matrícula del próximo curso ronda en las 500 personas de todas las provincias del país pues los procesos de selección se están haciendo más rigurosos.
 
Para poder ingresar a la carrera deben ser primero líderes comunitarios, elegidos por su población, obviamente tienen que vivir en el lugar que los postula, ser mayores de 18 años, bachilleres, pasar un proceso de selección con entrevista y, en una segunda etapa, aprobar al examen nacional para la educación superior.
 
Así describe a grandes rasgos Merino el camino para ser admitidos en un curso que ayudará a conformar equipos de atención integral de salud, compuestos por un médico, una enfermera y un técnico.
 
Dentro de ese equipo multidisciplinario cada cual tiene sus funciones específicas, el doctor brinda atención médica, la enfermera el seguimiento o el cuidado directo del paciente y el técnico se encarga de la prevención y la promoción en la comunidad, enfatizó.