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Abrir un nuevo campo de batalla

Al capitán Raúl Castro Ruz se le ascendió al grado de comandante y se le asignó el mando de una columna.
Al capitán Raúl Castro Ruz se le ascendió al grado de comandante y se le asignó el mando de una columna.

Datum: 

06/12/2016

Quelle: 

Revista Bohemia

Autor: 

Transcurridos 15 meses de experiencia guerrillera en la Sierra Maestra se había acentuado en el pensamiento militar del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz la posibilidad de transitar a una etapa superior en la conducción de la guerra con la ampliación del teatro de operaciones.
 
Su primera expresión fue en julio de 1957 al crear la Columna No. 4 bajo el mando del comandante Ernesto Guevara para operar al este del Pico Real del Turquino, siguió la salida fuera del territorio del Primer Frente José Martí de las columnas 6 y 3 con los comandantes Raúl Castro y Juan Almeida al frente, continuó con la campaña del capitán  Camilo Cienfuegos en los llanos del Cauto y luego de la derrota de la Ofensiva de Verano de la tiranía, con la creación y envío de varias columnas con la misión de establecer nuevos frentes para llevar la guerra a todo el país.
 
La Columna No. 6 Frank País y la Columna No.3 Santiago de Cuba, fundarían respectivamente el Segundo Frente Oriental Frank País y el Tercer Frente Mario Muñoz. Ambas partieron el primero de marzo de 1958 desde el campamento del comandante Ernesto Guevara en La Mesa.
 
El comandante Raúl Castro Ruz escogió 67 hombres de elevada disciplina, valor y resistencia física organizados en cuatro pelotones, a los que se sumarían otros 11  en el trayecto; como segundo jefe fue nombrado el capitán Efigenio Ameijeiras Delgado.  La acción  recibió el nombre de Operación Frank País. El 11 de marzo de 1958 la columna llegó a Piloto del Medio, término municipal de San Luis, donde quedó fundado el Segundo Frente Oriental Frank País.
 
El comandante Raúl Castro Ruz inició el estudio del terreno, depuró a los grupos de alzados sin vínculos con organizaciones revolucionarias y contactó a los destacamentos guerrilleros del  Movimiento 26 de Julio fusionándolos a sus pelotones para dar vida a cinco compañías, que en su desarrollo cualitativo y cuantitativo serían  las futuras columnas. También creó Comités de Campesinos Revolucionarios que demostraron ser una importante ayuda en las tareas de abastecimientos, inteligencia, mensajería y otras; la primera comandancia radicó en El Aguacate, término municipal de Guantánamo. Asimismo, se crearon talleres, puestos médicos y otras dependencias.
 

Ataque y toma del ayuntamiento de Alto Songo

El 12 de marzo de 1958 había sido firmado en la Sierra Maestra por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz  y el delegado de la Dirección Nacional del Movimiento 26 de Julio, Faustino Pérez Hernández el Manifiesto del 26 de Julio al pueblo de Cuba por el cual se convocaba a una huelga nacional. Las fuerzas rebeldes brindarían apoyo armado en sus respectivos  territorios; en el Segundo Frente Oriental Frank País el plan llevó el nombre de Operación Omega y se materializó con la toma del aeropuerto de Moa y  el ataque a varios cuarteles enemigos.
 
Ocupar el aeropuerto tenía la finalidad de apoyar el arribo por vía aérea de armas adquiridas por el Movimiento 26 de Julio en Costa Rica. Aunque la nave aterrizó en Cienaguilla, Sierra Maestra, engendró la idea de poseer medios aéreos propios para esa y otras tareas. El 12 de abril de 1958 se creó por decreto del comandante Raúl Castro la Fuerza Aérea Rebelde que llegó a tener 16 aviones, pistas, talleres, aseguramientos y cumplió más de 70 misiones, entre ellas tres de combate.
 
La huelga general efectuada el 9 de abril no se desarrolló como estaba prevista por un conjunto de errores en su organización y desarrollo. El alto mando militar de la tiranía pensó que el revés había  socavado la moral combativa del Ejército Rebelde  y planificó un ataque aniquilador. El plan operativo se llamó FF (Fase  Final  o  Fin  de  Fidel).
 
El 25 de mayo comenzó el ataque contra el Primer Frente José Martí. La fecha del 6 de agosto marcó el total descalabro del ejército de la tiranía en la Sierra Maestra, que empleó unos diez mil efectivos con apoyo de la aviación, artillería, blindados, el resto de las armas y servicios. El 28 de mayo se inició contra el Segundo Frente Oriental Frank País, desde Guantánamo y Mayarí con la dirección principal del golpe hacia El Aguacate, asiento de la comandancia. La idea del enemigo consistía en debilitar y desalojar a las fuerzas rebeldes de los territorios donde se habían asentado, obligarlas a concentrarse y aniquilarlas.
 
Para los combatientes del Segundo Frente Oriental Frank País la consigna ¡No pasarán! fue el arma más valiosa al defender con firmeza las posiciones y hostigar constantemente al enemigo. Así vencieron a una fuerza de unos dos mil efectivos con todo tipo de apoyo, que emprendió la retirada general a partir del 30 de junio.
 
En esa etapa la aviación intensificó los bombardeos  y  ametrallamientos. Niños, mujeres, ancianos y civiles en general eran las  víctimas  más frecuentes. Para poner fin al genocidio, el comandante Raúl Castro Ruz emitió la Orden Militar No. 30 de fecha 22 de junio de 1958 para desarrollar la Operación Antiaérea, que consistía en capturar y retener a norteamericanos (excepto mujeres y menores) para que fueran  testigos de los crímenes de una aviación abastecida en la ilegal Base Naval de Estados Unidos en Guantánamo.
 

Retenidos durante la Operación Antiaérea.
En la foto la compañera Vilma Espín
comparte con algunos de ellos.

A los 49 norteamericanos retenidos, de ellos 21 marines, se les crearon condiciones para su estancia segura. Poco después se iniciaron conversaciones con el cónsul norteamericano acreditado en Santiago de Cuba, donde actuó como intérprete la compañera Vilma Espín. Más tarde Fidel ordenó dar por terminada la operación previendo que podría utilizarse por Estados Unidos para justificar una intervención militar en Cuba.
 
Vilma ocupaba la responsabilidad de ser delegada de la Dirección Nacional del Movimiento 26 de Julio en el Segundo Frente Oriental Frank País, además  dirigió el Departamento de Colaboración y Abastecimientos.
 
Derrotada la ofensiva enemiga en el Segundo Frente Oriental Frank País y concluida la Operación Antiaérea, comenzaba una etapa  de  reorganización total sin detener las operaciones militares. La Orden Militar No. 40 de 3 de agosto de 1958 oficializó las columnas No. 6 Juan Manuel Ameijeiras y No. 9 José Tey, una constituida el primero de julio, la otra creada por el Movimiento 26 de Julio en Santiago al calor de la huelga de abril e incorporada el 12 de mayo al Segundo Frente Oriental Frank País. Sus  jefes fueron los comandantes Efigenio Ameijeiras Delgado y Belarmino Castilla Mas.
 
La Orden también crea las columnas No. 7 Abel Santamaría, No. 8 Antonio López Fernández y  No. 10 René Ramos Latour. Luego, por necesidades organizativas, las columnas 7, 8, 9 y 10 se denominarían 17, 18, 19 y 20, la última con el nombre de Gustavo Fraga. Los jefes de las columnas 17, 18 y 20 fueron el comandante Antonio Enrique Lussón, comandante Félix Pena Díaz y capitán Demetrio Montseny Villa, ascendido más tarde a comandante.
 

En el Ejército Rebelde nunca fue maltratado
de obra o de palabra un prisionero

Asimismo, por exigencias de la guerra, el jefe del Segundo Frente Oriental Frank País emitió la Orden Militar No. 47 de fecha 15 de octubre de 1958 por la cual se formó la Columna No. 16 Enrique Hart bajo el mando del comandante Carlos Iglesias Fonseca.  De esta manera el Segundo Frente Oriental Frank País llegó a controlar unos 12 000 km2 correspondientes a los municipios de Alto Songo, Mayarí, Sagua de Tánamo, Baracoa, Yateras, Guantánamo, San Luis, Banes y Antillas.
 
De julio a octubre tienen lugar acciones que causan sensibles bajas al enemigo, se deteriora más su moral combativa y se liberan nuevos territorios. En septiembre se traslada la Comandancia Central para Mayarí Arriba y el 21 de ese mes sesiona en Soledad de Mayarí el Congreso Campesino en Armas. Por último, en el acelerado proceso de perfeccionamiento el comandante Raúl Castro Ruz firma la Orden Militar No. 49 de fecha 28 de octubre de 1958 que pone en vigor la Ley Orgánica del Segundo Frente, máximo exponente del grado de organización alcanzado. Se oficializan los departamentos de: Guerra, compuesto por las fuerzas terrestres y la Fuerza Aérea Rebelde, Justicia, Sanidad, Educación, Finanzas, Propaganda, y Construcciones y Comunicaciones, así como el buró Agrario y el Obrero.
 
A partir de noviembre y hasta fines de diciembre, el Segundo Frente Oriental Frank País realizó la Operación Gancho y posteriormente la Operación Flor Crombet. En el último mes de guerra, el 8 de diciembre, se efectuó el Congreso Obrero en Armas.
 
Gancho fue el nombre del plan elaborado en el Segundo Frente Oriental Frank País para cumplir las instrucciones de la Comandancia General del Ejército Rebelde de sabotear la farsa electoral de la tiranía, que se efectuaría el 3 de noviembre para darle cobertura legal al régimen y una imagen de apertura democrática. Las acciones coordinadas de todas las columnas cumplieron el cometido de impedir o entorpecer su realización en ese territorio.
 
El 13 de noviembre Radio Rebelde reprodujo las órdenes y orientaciones del Comandante en Jefe para el comienzo de la batalla final por Oriente. Al Segundo Frente Oriental Frank País se le ordenó tomar los cuarteles del triángulo San Luis-Mayarí-Guantánamo. El plan elaborado se llamó Operación Flor  Crombet.
 
Uno a uno comenzaron a caer los cuarteles que aún resistían, los frentes guerrilleros recibían órdenes directas del jefe de la Comandancia General y cumplían con éxito su cometido.
 
El Segundo Frente Oriental Frank País hizo una extraordinaria contribución a la revolución que se construía, tanto en el terreno militar como en la transformación de la vida de todos los que estuvieron en el territorio bajo su control. Si bien sus más de doscientas acciones de guerra permitieron ganar un amplio territorio para las armas rebeldes, con lo que coadyuvó a acelerar la derrota de la dictadura, hizo también un gran aporte en la organización civil, en correspondencia con la transformación revolucionaria que se estaba operando, como parte del mismo proceso histórico. La vida dentro de la Revolución no podía reproducir las formas del sistema que se estaba destruyendo y eso se hizo realidad en aquel amplio y complejo territorio.
 
Para alcanzar la victoria ofrendaron la vida numerosos revolucionarios. El Mausoleo del Segundo Frente Oriental Frank País guarda los restos de 243 combatientes caídos en la lucha y como ha afirmado el general de ejército Raúl Castro, “allí está ardiendo, en la llama eterna que los acompaña, toda la gloria de esta historia”.
 
* Investigador de la Oficina del Historiador de las FAR.