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Valor ideopolítico de La Historia me Absolverá

Datum: 

15/11/2017

Quelle: 

Portal Cultural Principe

Autor: 

La Historia me Absolverá, conocido también como el alegato de autodefensa de Fidel Castro, ante el juicio por los acontecimientos de los asaltos a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, puede analizarse con muy diversos fines: como pieza oratoria o del Derecho, para profundizar en hechos históricos, ubicar raíces ideológicas, manera singular de presentar al pueblo el programa político de una naciente organización de izquierda, expresión de la comunión entre el pensamiento liberador más avanzado del siglo XIX cubano y la teoría marxista – leninista.

Es sin dudas un documento siempre presto a sorprender al lector con una nueva arista o un enfoque no advertido en lecturas anteriores.
Para todas aquellas personas e instituciones que tienen como finalidad defender la historia e identidad nacional y cultural del pueblo cubano, reviste especial importancia volver a él una y otra vez, para utilizarlo sin dogmas, extraer sus esencias y sobre todo, aprovechar sus enseñanzas en la compleja tarea de formar, desarrollar y fortalecer la ideología de la Revolución.
 
El contenido de ese manifiesto, como vía utilizada por su autor para influir en los sentimientos, opiniones, estados de ánimo del pueblo, tiene en la actualidad una vigencia inestimable en la labor educativacon las nuevas y futuras generaciones de cubanos al aportar ideas de especial valor ideopolítico para incorporar al pueblo de manera consciente a la nueva etapa de luchas; por la profundidad de su contenido, esas ideas han trascendido y continúan siendo referente para los revolucionarios. Entre ellas se destacan:
 
Apego a la verdad:
 
“Solo estoy comprometido con la verdad” (p. 17).Consecuente con esa idea es toda la exposición, que no obvia el reconocimiento del error de dividir las fuerzas, o de la honestidad y decoro de militares con un comportamiento digno.
 
Ni la solicitud de 26 años de cárcel o los intentos de asesinarlo impiden la denuncia de los crímenes cometidos y de la responsabilidad del tirano Batista con los mismos, al tiempo que recuerda su triste papel durante los once años en el poder.  

Asimismo, reconoce en diferentes momentos a los militares íntegros que custodiaron los prisioneros y respetaron sus vidas.  
 
Alude a los médicos que quizás con la intención de salvarle la vida, le certificaron una enfermedad inexistente, por su compromiso con la verdad, refiere los detalles de ese suceso.
 
Fidel es consciente del riesgo que significaba alertar al imperialismo yanqui de los propósitos de la naciente revolución; no obstante, no duda en denunciar problemas económico - sociales esenciales asociados a la condición neocolonial del país, así por ejemplo explica: El ochenta y cinco por ciento de los pequeños agricultores cubanos está pagando renta y vive bajo la perenne amenaza del desalojo de sus parcelas. Más de la mitad de las mejores tierras de producción cultivadas está en manos extranjeras. En Oriente, que es la provincia más ancha, las tierras de la United Fruit Company y la West Indian unen la costa norte con la costa sur […] ¿cómo es posible que continúe este estado de cosas? (p.69)
 
Entre otros males, analiza el pobre desarrollo de la industria nacional y la imposibilidad de que resistan la competencia de las industrias europeas y norteamericanas y proclama los pasos del futuro gobierno revolucionario para revertir ese estado de cosas.  
 
Integralidad de los análisis:
 
El examen dialéctico de la realidad nacional permite profundizar en diferentes temas; empieza por las arbitrariedades que impidieron el cumplimiento de las más elementales normas para la defensa de un acusado y el irrespeto del régimen hacia el tribunal, la falsedad de las acusaciones, la injusta implicación de decenas de figuras de la vida política. La amplitud y objetividad de sus argumentos prevalecen frente a las mentiras y calumnias urdidas contra los jóvenes asaltantes. Es el punto de partida para ganar la simpatía popular, que precedería a la incorporación resuelta a la lucha.
 
Al abordar los problemas económicos, devela sus causas y efectos en las clases y grupos sociales mayoritarios. Desde diversas aristas evalúa tanto la base económica como la superestructura, para llegar a la conciencia del auditorio primero, y de todo el pueblo después.  
 
Confianza en el triunfo:  
 
El golpe de Estado del 10 de marzo de 1952 creó condiciones que en su desarrollo desembocarían en una situación revolucionaria y Fidel, primero con las acciones del 26 de julio, y posteriormente con su alegato de autodefensa, pulsa el sentir popular y se propone acelerar el proceso de maduración del factor subjetivo, acorde a la tesis leninista respecto a la necesidad de lograr la capacidad de la clase revolucionaria para llevar a cabo acciones revolucionarias de masas suficientemente fuertes para hacer caer al régimen.
 
Por ello, y pese a la compleja situación del juicio, Fidel estructura cuidadosamente su discurso, de modo que le permita avanzar en el camino escogido para su vida. Lleva consigo la experiencia de casi un siglo de luchas por la liberación nacional, sabe el precio de la pérdida de la confianza en el triunfo, más efectiva que la superioridad en armas y hombres durante la guerra grande y que más tarde, tras la guerra necesaria, condujo a una parte de los oficiales independentistas al abandono de la lucha por la soberanía no conquistada.
 
La denuncia de los males de la nación, los crímenes cometidos por el régimen, la difusión del programa de luchas, las constantes menciones al Maestro y a la historia, deviene en la vía para favorecer la maduración de las condiciones subjetivas para la lucha y es expresión de que no se siente derrotado, simplemente varía el método de lucha, acorde a las nuevas circunstancias.  
 
Al estudiar la sociedad cubana identifica los seis males fundamentales, reflexiona sobre ellos y expone con cifras irrefutables cómo se manifiestan y la solución prevista por los revolucionarios.  
 
Lo analizado muestra la coherencia del pensamiento revolucionario de Fidel Castro. Las tesis elegidas responden a exigencias histórico concretas, sustentadas por la unidad de principios y la ideología de la Revolución Cubana lo que favorece su influencia en la formación y/o desarrollo de la conciencia ideopolítica del pueblo.
 
Referencias bibliográficas:
Castro Ruz. (1973)La historia me absolverá, Editorial Ciencias Sociales, La Habana.
 
Bibliografía:
Castro F. (1973). La historia me absolverá, Editorial Ciencias Sociales, La Habana.

 
*Doctora en Ciencias, Profesora, Escuela Provincial del Partido. Camagüey. Miembro de la Cátedra Honorífica Fidel Castro.
**Doctora en Ciencias, Especialista en Promoción y Comunicación del Centro Provincial de Patrimonio Cultural.Miembro de la Cátedra Honorífica Fidel Castro.
 
Autor: Maritza Alvarez López* y Talia Montero Pereira**

 
Fuente: Escuela Provincial PCC y Centro Provincial de Patrimonio Cultural en Camagüey