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Diálogos con la historia (VIII parte)

Fecha: 

14/03/2011

Fuente: 

Periódico El Sol de México
CON MOTIVO DE LA VISITA DE FIDEL CASTRO RUZ A LA UNIÓN SOVIÉTICA Ciudad de México.- El Presidente del Consejo de Ministros de la URSS, N. Jruschov, ha invitado al Primer Ministro del Gobierno Revolucionario de la República de Cuba, Fidel Castro Ruz, a que haga una visita de amistad a la Unión Soviética en 1963 y conozca las conquistas y éxitos del pueblo soviético.
 
El compañero Fidel Castro ha aceptado la invitación del camarada N. Jruschov.
 
Durante la visita se tiene la intención de tratar cuestiones relativas al robustecimiento sucesivo de la amistad entre la República de Cuba y la URSS; así como, intercambiar opiniones de otros problemas de interés común.
 
La fecha del viaje del compañero Fidel Castro se acordará complementariamente entre los gobiernos de la URSS y la República de Cuba.
 
(«Pravda», 17 de abril de 1963) (TASS)
 
* NOS ALEGRAMOS MUCHO DE LA LLEGADA DEL GUÍA DEL PUEBLO CUBANO
 
Quisiera expresar también nuestra satisfacción particular con motivo de la visita que el camarada Fidel Castro, jefe del fraternal pueblo cubano, que ha emprendido la senda de la construcción del socialismo y avanza firmemente por ella, hará este año a nuestro país. (Clamorosa y prolongada ovación).
 
Nos alegramos mucho de que el camarada Castro haga su primera visita oficial fuera de Cuba precisamente a nuestro país, a la Unión Soviética, cuyos pueblos fueron los primeros en tomar el poder en sus manos y emprender el camino de la construcción del socialismo. (Tempestuosos aplausos).
 
Estoy convencido de que todos los soviéticos esperan con gran entusiasmo el día en que el camarada Fidel Castro llegue a nuestra tierra para expresarle, en su persona, nuestro respeto al heroico pueblo cubano y nuestra admiración por su hazaña revolucionaria. Por donde quiera que vaya nuestro querido amigo y hermano cubano, los soviéticos le tributarán una acogida calurosa y cordial. (Atronadora ovación).
 
(Del discurso de N. Jruschov pronunciado en la Conferencia de los Trabajadores de la Industria y la Construcción de la RSFSR el 24 de abril de 1963).
 
* ACERCA DE LA VISITA DE FIDEL CASTRO RUZ A LA UNIÓN SOVIÉTICA
 
Fidel Castro Ruz, héroe nacional del pueblo cubano, líder de la Revolución Socialista Cubana, Primer Secretario de la Dirección Nacional del Partido Unido de la Revolución Socialista y Primer Ministro del Gobierno Revolucionario de la República de Cuba, nació el 13 de agosto de 1926 en Birán, pueblecito próximo a la ciudad de Mayarí, en el norte de la provincia de Oriente.
 
Desde la infancia, transcurrida en el seno de la familia de ricos terratenientes, Fidel Castro destacó entre los muchachos de su edad por el extraordinario deseo de saber, su mente curiosa y el afán de comprender los fenómenos que le rodeaban. Las aptitudes poco comunes que puso de manifiesto en los años escolares, el espíritu de compañerismo, la honradez y la franqueza acendradas le hicieron acreedor al respeto y el prestigio entre sus amigos.
 
«Fidel Castro escribirá hermosas páginas en el libro de su vida. Hay en él un noble material que encontrará su escultor», se decía en el certificado que obtuvo al salir del liceo. Estas palabras fueron proféticas. El escultor ha sido el pueblo. Fidel Castro vinculó toda su vida con el pueblo y consagra todas sus fuerzas, su inteligencia y su energía a la lucha por la felicidad popular.
 
En los años juveniles ejercieron ya una enorme influencia sobre la formación de las opiniones políticas de Fidel Castro las ideas liberadoras revolucionarias del héroe revolucionario José Martí, hijo preclaro del pueblo cubano.
 
Habiendo ingresado en 1945 en la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana, Fidel Castro se incorporó enseguida a la vida política. En un círculo de compañeros suyos conoció aquí la doctrina marxista-leninista. El Manifiesto Comunista, los trabajos de Marx, Engels y Lenin atrajeron a Fidel Castro, obligándole a reflexionar en el duro destino del tan sufrido pueblo cubano, en las vías de la lucha para emanciparlo del yugo imperialista y de la explotación de la burguesía nacional y de los latifundistas. Según palabras del propio Fidel Castro, al graduarse de la Universidad de La Habana en 1949 se encontraba ya fuertemente influenciado por el marxismo-leninismo.
 
Una vez Doctor en Derecho, Fidel Castro abrió un bufete. Pero lo que le ocupaba sobre todo era la violenta lucha política que tenía lugar por entonces en Cuba. Combatía con denuedo contra el gangsterismo político. Protestaba contra la corrupción dentro del Gobierno de Prío Socarrás, contra el terror policiaco en el país y participaba en las manifestaciones democráticas.
 
A la militarada del 10 de marzo de 1952 encabezada por Batista contestó Fidel Castro inmediatamente con una airada protesta llamando a la lucha contra el nuevo dictador.
 
Con un grupo de jóvenes de opiniones revolucionarias, comenzó a planear la insurrección armada contra el régimen dictatorial, la que se inició el 26 de julio de 1953. Aquel día, 165 jóvenes capitaneados por Fidel Castro emprendieron el heroico asalto al Moncada, en la ciudad de Santiago de Cuba, donde se hallaban acuartelados varios miles de soldados. Pero las fuerzas eran desiguales. Muchos de los compañeros de Fidel Castro cayeron en el combate o fueron fusilados por Batista. Más tarde fueron detenidos también Fidel Castro, su hermano Raúl y otros participantes del asalto que habían quedado con vida.
 
Fidel Castro y sus compañeros fueron juzgados en el otoño de 1953. Durante el proceso pronunció Fidel el famoso discurso conocido con la denominación de "La Historia me Absolverá", donde hizo una crítica aplastante de la sangrienta dictadura de Batista y expuso el programa de la lucha de liberación nacional y de reformas revolucionarias para Cuba.
 
Como una de las «pruebas» contra Fidel Castro figuraba en el juicio un pequeño tomo de obras de Lenin encontrado en su casa durante un registro. A la pregunta: «¿De quién es este libro?» Contestó Fidel Castro a los jueces: «Es un libro nuestro y quien no lee estos libros es un ignorante».
 
Fidel Castro y sus compañeros fueron condenados a quince años de cárcel. Sin embargo, ni aún en las mazmorras de Batista en la Isla de Pinos, dejó Fidel Castro de preparar el levantamiento popular, manteniendo contacto permanente con los compañeros que se hallaban en libertad.
 
Después del asalto al Moncada, de la conducta viril y del fogoso discurso en el juicio, Fidel Castro se convirtió en héroe nacional. Comenzaron a constituirse en el país grupos de émulos suyos agrupados en la organización revolucionaria de masas «Movimiento del 26 de Julio».
 
En mayo de 1955 y en vísperas de la farsa de elecciones parlamentarias organizadas por la dictadura, Batista se vio obligado, bajo la enorme presión de la opinión pública, a amnistiar a los presos políticos. Fueron puestos en libertad Fidel Castro y demás participantes del Asalto al Moncada. A fines del mismo año, Fidel Castro emigró con un grupo de compañeros suyos a México, donde empezó a preparar un destacamento de revolucionarios cubanos para desembarcar en Cuba y organizar un levantamiento popular en la Isla.
 
El 2 de diciembre de 1956, el destacamento armado de 82 hombres mandado por Fidel desembarcó del Yate Granma en la costa oriental de la provincia de Oriente, donde, habiendo tropezado inesperadamente con un retén, hubieron de entablar enseguida combate con las tropas de Batista. El destacamento de revolucionarios fue derrotado. En la Sierra Maestra sólo se reunieron luego con Fidel Castro doce hombres que comenzaron la guerra de guerrillas contra la dictadura, marchando en la vanguardia del movimiento revolucionario de masas, cada día más amplio en el país.
 
Durante los dos años pasados en La Sierra Maestra, Fidel Castro llevó a cabo una labor gigantesca: creó el Ejército Rebelde; dirigió constantemente las organizaciones civiles del «Movimiento 26 de Julio», se preocupó de la estrecha interacción, en la lucha contra la dictadura, con otras organizaciones auténticamente revolucionarias de Cuba: el Partido Socialista Popular y el «Directorio Revolucionario del 13 de Marzo»; constituyó en los territorios liberados los primeros organismos del poder popular, llevando a cabo las primeras reformas revolucionarias.
 
La lucha revolucionaria armada iniciada por Fidel Castro contra la dictadura de Batista y la oligarquía feudal latifundista, por la liberación del país del dominio imperialista y por la conquista de la auténtica independencia nacional de Cuba se vio coronada por la histórica victoria: del 1° de enero de 1959, con la cual fue derrocada la dictadura de Batista.
 
A principios de enero de 1959 quedó constituido el Primer Gobierno Revolucionario de Cuba, del que Fidel Castro pasó a ser Primer Ministro el 16 de febrero.
 
Comenzó una nueva etapa de la Revolución Cubana: la etapa de desarrollo y robustecimiento del poder revolucionario en el país, etapa de transformación de la victoriosa revolución antiimperialista, antifeudal y popular democrática en revolución socialista, que transcurre en medio de una encarnizada lucha de clases contra los enemigos interiores y exteriores.
 
Como líder de la Revolución y Jefe del Gobierno, Fidel Castro llevó a cabo, durante ese período, una labor realmente titánica. En breve plazo, a iniciativa suya y con su participación directa, se limpió de secuaces de Batista el aparato estatal y se procedió a su organización revolucionaria, se disolvió el ejército anterior que servía a las clases explotadoras y fueron creadas las Fuerzas Armadas Revolucionarias, auténticamente populares. El 17 de mayo de 1959 se aprobó la histórica Ley de Reforma Agraria, elaborada bajo la dirección de Fidel Castro, que sentó la base para la subsiguiente reorganización socialista de la producción agrícola. Más tarde fueron nacionalizados las empresas industriales y comerciales, los bancos y el transporte ferroviario. Bajo la dirección de Fidel Castro, el pueblo cubano terminó definitivamente en los dos primeros años con la hegemonía de los monopolios imperialistas extranjeros -norteamericanos y otros- en el país.
 
Desde el primer día del poder revolucionario, Fidel Castro enarboló la bandera de la revolución cultural que se lleva a cabo con buen éxito en la Isla de la Libertad.
 
Al mismo tiempo que dirigía la realización de profundas transformaciones sociales y económicas, Fidel Castro llevaba a cabo una lucha muy complicada contra los elementos burgueses, oportunistas y anticomunistas de derecha que se habían introducido en los primeros tiempos de la Revolución en el aparato del poder estatal, contra toda clases de facciosos que trataban de retrotraer la marcha de la revolución. En sus numerosos discursos de aquel período, Fidel Castro derrotó ideológicamente a la reacción interior que, con ayuda del espantajo del anticomunismo, trataba de escindir las filas de la Revolución. Así desbrozó el camino a la sólida unidad de todas las fuerzas revolucionarias fundamentales del país y a la creación subsiguiente de un nuevo partido marxista- leninista: El Partido Unido de la Revolución Socialista.
 
En 1961 tuvo lugar la unificación de las tres fuerzas revolucionarias esenciales de Cuba: «Movimiento 26 de Julio», Partido Popular Socialista y «Directorio Revolucionario del 13 de Marzo» para formar las Organizaciones Revolucionarias Integradas (ORI), de las que Fidel Castro fue elegido Primer Secretario. Las ORI fueron el embrión del Partido Unido de la Revolución Socialista, que ahora se encuentra en proceso de creación.
 
Fidel Castro lucha incansablemente por la pureza de las filas de la vanguardia marxista - leninista de la Revolución Cubana y combate resueltamente el sectarismo y demás manifestaciones oportunistas entre las fuerzas revolucionarias.
 
Fidel Castro ha estado y se halla al frente de la lucha contra todas las confabulaciones imperialistas y contrarrevolucionarias. En las jornadas de abril de 1961 fue derrotada, bajo su mando directo, una brigada de mil quinientos intervencionistas, mercenarios del imperialismo yanqui. En vísperas de la intervención, el 16 de abril de 1961, Fidel Castro había proclamado que la Revolución Cubana es, por su carácter, una revolución socialista.
 
Durante las inquietantes jornadas de la Crisis del Caribe, en octubre de 1962, cuando el imperialismo norteamericano colocó el mundo al borde de una guerra termonuclear, el pueblo cubano dirigido por Fidel Castro puso de manifiesto un valor y heroísmo enorme. Por aquellos días presentó Fidel Castro sus famosos cinco puntos, que se convirtieron en programa del arreglo pacífico en la zona del mar Caribe.
 
El nombre de Fidel Castro se cita con razón entre los nombres de los que han hecho una enorme aportación al fortalecimiento y la garantía de la seguridad de los pueblos. Por sus relevantes méritos en la lucha por la paz, en abril de 1961 le fue concedido a Fidel Castro el Premio Internacional Lenin «Por el fortalecimiento de la paz entre los pueblos».
 
Fidel Castro es un firme luchador por la unidad de los países del campo socialista, por la unidad del movimiento comunista internacional. Fortalece incansablemente la fraternal amistad entre los pueblos soviético y cubano. «¡Fidel, Jruschov! ¡Estamos con los dos!», proclaman los trabajadores de Cuba, expresando en esta consigna sus profundos sentimientos de amistad con la Unión Soviética.
 
La Filosofía Marxista arraigó en Fidel Castro en el transcurso de la propia lucha revolucionaria. A medida que se desarrollaba la Revolución, dice Fidel Castro, «más nos convencíamos de la justeza de las ideas de Marx y Engels y de la explicación verdaderamente genial del socialismo científico hecha por Lenin... Yo soy un marxista-leninista y seré marxista-leninista hasta el último día de mi vida».
 
* ¡UN CALUROSO SALUDO FRATERNAL AL PUEBLO SOVIÉTICO!
 
TELEGRAMA
 
Al compañero N.S. Jruschov, Primer Secretario del CC del PCUS y Presidente del Consejo de Ministros de la URSS.
 
Acabamos de cruzar la frontera soviética. Este momento nos ha producido a todos una profunda emoción. Sentimos con toda su fuerza la profunda amistad y la hermandad indestructible que se han forjado entre nuestros dos pueblos. El camino del avión en el que volamos a la Unión Soviética ha sido largo. Dicen que es la mayor línea sin escalas entre las que existen hoy día. Pero el «TU-114» ha cubierto brillantemente esta distancia. Los ingenieros y los obreros soviéticos pueden enorgullecerse de sus cualidades insuperables. La tripulación de la nave nos ha hecho sentir ya, con su solicitud extraordinariamente cordial hacia nosotros, todo el amor del pueblo soviético a nuestro país. En estos minutos inolvidables enviamos a Ud. y a todo el pueblo soviético nuestro caluroso saludo fraternal.
 
Fidel Castro
 
A bordo del avión «TU-114», 27 de abril de 1963