Artículos

Rolando nos cuenta de cuando Fidel habló en el CAI Fernando de Dios en Holguín

Fecha: 

12/04/2019

Fuente: 

Radio Angulo

Autor: 

Ese es el Fidel del pueblo, apretando manos allá, en cualquier lugar de esta Isla, acostumbrado a intercambiar, a conocer los puntos de vista de los demás, porque decía: “no se puede lograr absolutamente nada si no es con la participación de las masas, es decir, con la participación del pueblo…”.
 
A la zafra azucarera le dedicó inmensas jornadas desde el mismo triunfo de la Revolución, no solo por lo que representaba como rubro exportable sino por lo que significa como elemento identitario para los trabajadores del sector.
 
Rolando Guerrero Mestre tuvo la oportunidad de conversar directamente con el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro Ruz. Tenía 35 años y era el Director del Complejo Agroindustrial (CAI) Fernando de Dios en ese momento, en el poblado de Tacajó, municipio Báguanos en esta nororiental provincia cubana de Holguín.
 
“El 28 de mayo de 1996 tuvimos la presencia del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz en el acto por el cumplimiento del plan”.
 
“Esto fue algo grandioso para el pueblo de Tacajó por lo que representó desde el punto de vista del estímulo la visita de Fidel”.
 
“Habíamos hecho una zafra buena, motivada por la emulación por el 26 de julio. Ese año Holguín llega a ser la mayor productora de azúcar del país, y en el central Fernando de Dios habíamos iniciado el Proyecto Reloj que era un proyecto de innovación tecnológica, con las universidades, con centros de investigación y de un grupo de centros más que se integraron con vistas a llevar a vías de hecho varios proyectos de producción y de investigación, y que todo eso unido al esfuerzo de los trabajadores se hizo una zafra muy buena, muy eficiente”.
 
“Ese año Fidel seguía mucho la zafra, yo creo que Fidel tenía un seguimiento constante de la zafra, de cómo se comportaba y a él le preocupaba el hecho de que Holguín estuviera haciendo zafra a pesar de las lluvias de ese año, cómo Fernando de Dios lograba moler”.
 
“Supimos que Fidel iba a ir al Fernando de Dios a las tres de la mañana, estábamos preparando un acto por el cumplimiento del plan de zafra, ya a las tres de la mañana nos dicen: Fidel es el que va a venir aquí, va a llegar a las 10 de la mañana. Entonces toda la noche estuvimos preparando el acto, estaba lloviendo incluso y estábamos moliendo y la preocupación mayor mía era que el central se fuera a parar por caña”.
 
“Entonces hicimos un esfuerzo extraordinario para que el central estuviera moliendo todo el tiempo, porque en aquel momento solamente le cabían 8 carros de ferrocarril, que se muelen en alrededor de una hora, una hora y minutos, la preocupación mayor que teníamos era lograr poner aquellos carros, que no dejara de moler el central y permitir que pasara dentro del central la caravana en la que venía Fidel”.
 
“Alrededor de las 10.10 entró Fidel en los geeps que acostumbraba hacer esos recorridos, venía con él un grupo más de dirigentes que lo acompañaban. Llegó, nosotros ya estábamos esperándolo, el subió, nos saludó a todos, Jorge Luis Sierra (Primer Secretario del PCC por entonces en la provincia de Holguín) le pidió que le dijera algunas palabras a los trabajadores y Fidel le preguntó, bueno y quien me va a anteceder, Sierra me miró y dijo, bueno Rolando. Me tocó hablar, yo había preparado un pequeño discurso de los resultados que habíamos alcanzado en la zafra, y creo que fue algo que me tocó en aquel momento delante de Fidel, poderle informar del cumplimiento, los indicadores como lo habíamos logrado y los resultados, en sentido general”.
 
“Durante esa visita de Fidel al central Fernando de Dios le explicamos que teníamos una estrategia a partir de los centros de acopio que poseíamos, eran ocho centros de acopio en aquel momento y creo que una de las cosas que daba un nivel de seguridad para buscar la caña para que el ingenio moliera la norma potencial era la estrategia que hacíamos, atendiendo a los trabajadores, moviéndonos en dependencia de donde no nos llovía, logrando mover los equipos, manteniendo el balance de corte y tiro en completa disposición combativa, porque la zafra es como la guerra, eso es día y noche, día y noche”.
 
“Buscábamos motivaciones para cumplir, logramos 63 veces la norma potencial ese año, este es uno de los aspectos que más le motivaba al Comandante, de cómo lo lográbamos”.

Rolando Guerrero Mestre

“Ese día de la visita de Fidel al Fernando de Dios se lo explicamos, además, creo que el reconocimiento mayor es que Fidel le habla a los trabajadores en el acto, que no estaba previsto que el hablara ahí, porque el acto central era en el ingenio Nicaragua, del municipio de Banes, pero en aquel momento Jorge Luis Sierra Cruz le pidió que le dijera algunas palabras a los trabajadores”.
 
“De ahí la felicitación de Fidel a los obreros cuando dijo que ´trabajando duro es como se alcanza la victoria´, donde reconoció que ´para aprender a hacer zafra había que ir a Fernando de Dios´, eso fue un reconocimiento a los trabajadores por el esfuerzo que habían hecho por la zafra, y dijo aquella frase que ha estado presente hasta hoy, de “que no hay otro sector que sienta tanto amor por lo que hace como el de los trabajadores azucareros”.
 
“Lo más impresionante de todo es que el pueblo sin saber que iba Fidel, cuando ya sabe que está en Tacajó, el pueblo completo se fue para la puerta del ingenio y otra parte se fue para el campo de pelota, y lo rodeó para saludar al Comandante en Jefe, para verlo, eso era lo más grande para los que estuvimos allí presentes”.
“Fue un estímulo para todos nosotros, con su presencia levantó el ánimo a seguir adelante, al combate”.
 
“Cuando se terminó el acto él se quedó, nos preguntó cómo se habían logrado los resultados, que le explicaran, fue breve, y de ahí partió para el central Nicaragua, porque el acto provincial era allá, donde también les habló a los trabajadores. Ese año es el que los holguineros se convierten en los mayores productores de azúcar del país, la zafra influyó mucho en los resultados de la sede por el 26 de julio, porque se hizo una zafra muy buena”.
 
“El secreto de la zafra es que tienes que llevar un seguimiento de todos los que intervienen en ella y Fidel era el ejemplo de eso. Nosotros seguíamos ese ejemplo, si Fidel estaba siguiendo todos los centrales del país día a día nosotros teníamos que hacer un esfuerzo extraordinario por lograr que el central hiciera un buen papel, y salíamos a buscar todos los días el cumplimiento del plan de la norma potencial, ese era el compromiso, cumplir todos los días, y yo creo que eso se logró impregnar en los trabajadores, el resultado fue que al final cumplimos la zafra, sobrecumplimos, aportamos un nivel de azúcar por encima y, Fernando de Dios, a través de los años, ha demostrado que tiene un colectivo de trabajadores extraordinarios”.
 
¿Qué significa para usted haberle dado la mano a Fidel?
 
“Había estado en algunas reuniones con el Comandante pero, así, de haber conversado con él era la primera vez que lo hacía, eso era algo muy impresionante, pienso que para todo revolucionario que hemos hecho nuestra vida estudiantil, laboral, con el triunfo de la Revolución, saludar, conversar con Fidel ha sido lo más grande que le pueda haber pasado a uno en la vida, era una aspiración de revolucionario tener esa oportunidad, me queda ese bonito recuerdo”.
 
“Se había preparado aquí en Holguín unos centralitos que lo hizo algún artesano con la foto de Fernando de Dios, en el caso nuestro; y así cada uno tenía su mártir, ese centralito Fidel no los entrega en el acto, yo conservo la foto que después me la mandaron del Comité Central, una foto con Fidel, tengo más de una, donde él me está entregando el centralito Fernando de Dios”.
 
¿Con qué otras personas estuvieron allí con Fidel?
 
“Estaba allí Santos Serrano que era del sindicato y también habló, estaba Carlos Cruz que era el Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) en ese momento del municipio de Báguanos, Luis López que era el Segundo Secretario del PCC; fue una conversación breve antes de ellos seguir para el central Nicaragua”.
 
“Cuando Fidel sale, en la puerta del central se baja del carro, eso fue algo también grande, era tanto el pueblo que Fidel se bajó y empezó a saludarlo y caminó, nosotros calculamos que haya caminado una cuadra, y los escoltas a la orilla de él, el geep a la orilla de él, él saludando, saludando, saludando, hasta que lograron montarlo al geep”.
 
“Cuando llegó al campo de pelota todos los niños de las escuelas, todo el pueblo completo estaba alrededor, y Fidel se desmontó en la entrada y fue saludando también hasta que llegó al helicóptero y se fue para el central Nicaragua”.
 
“Eso fue algo… fíjese que hasta del círculo infantil se fueron los muchachos, se fueron todos, de las escuelas: de la primaria, de la secundaria, de los centros de trabajo, se paralizó todo, eso es algo único que haya sucedido”.
 
“Fidel iba vestido normal, con su traje verde olivo. A Fidel cuando uno lo veía de cerca impresionaba mucho por su forma de ser”.
 
“Nosotros cada vez que íbamos a una reunión con Fidel era una tensión terrible, Fidel se reunía bastante con los azucareros, él se reunía con los Directores de los Complejo Agroindustriales (CAI), se reunía con los Delegados, con bastante frecuencia”.
 
“Yo tuve la posibilidad de estar como director de CAI por lo menos en cuatro o cinco reuniones con Fidel donde se evaluaba la zafra y todos los indicadores, su comportamiento y la atención a la caña, los programas de desarrollo, Fidel le prestaba una atención extraordinaria a la zafra, creo que eso es un ejemplo que no se puede perder, tenemos una cosa grande y es que el Comandante con todas las tareas que tenía le dedicaba tanto tiempo a la zafra, pues todo el que tenga que ver con la zafra, imagínese, si no tiene que dedicarle tiempo; la zafra es una tarea que es de todos, del pueblo, incluso”.
 
“Fidel va dos veces a Tacajó porque en la zafra del 70 va también, hay una historia bonita de que Fidel le regaló tabaco a los trabajadores, de que conversó con los obreros del laboratorio del central, todavía hay trabajadores que allí recuerdan ese día, es posible que haya algunos activos, pero hay algunos jubilados que me han hablado de esa visita de Fidel del año 70 que fue un estímulo, también, grande para la zafra del Fernando de Dios”.
 
“Yo creo que si hay un pueblo revolucionario, que ha sido fidelista aquí es Tacajó, por toda las raíces, tiene una historia bonita desde los Soviets, de las luchas obreras, de Ursinio Rojas que es de Tacajó y todas las luchas que llevó a cabo, es decir, que hay muchas raíces de estirpe revolucionaria, hay que hablar con los jubilados, la gente que lleva muchos años para saber con que amor la gente quiere ese central, como lo han defendido durante años, lo que ha seguido logrando Fernando de Dios como central, creo que en un momento determinado Fernando de Dios fue un proyecto que se hizo, fue el Proyecto Reloj que constituyó para la provincia de Holguín una escuela, porque también permitió demostrar un grupo de cosas que se pueden lograr, a partir de los recursos mismos que tenemos nosotros, es con lo que tenemos, una mejor aplicación de la ciencia, de la técnica y aspecto organizativos, lo que nos permitirá resultados superiores”.
 
Rolando Guerrero Mestre hoy es Director de Siembra en la Empresa Azucarera Holguín, tiene 58 años, pero en el año 1996 era el Director del Complejo Agroindustrial Fernando de Dios, del municipio de Báguano, cuatro años se pasó allí, recuerda perfectamente la llegada de Fidel al central y todo lo que conversó el líder histórico con motivo del cumplimiento del plan de azúcar de este central holguinero.